Todo cultivador tiene un primer cultivo de marihuana. En este post vamos a detallar los 10 errores del cultivador principiante más comunes. Si planeas empezar, o estás empezando, tu primer cultivo, desde SantYerbasi te animamos a leer este post y a aprovechar la experiencia de otros jardineros.
El cultivo de cannabis es algo muy sencillo que cualquiera puede hacer en su casa, siempre que tenga de unos conocimientos básicos sobre esta planta. Los problemas no son sólo una cosa de principiantes, a todo cultivador le suceden cosas que pueden causarle dolores de cabeza, lo importante es saber cómo reaccionar a estas adversidades para que no ocurra lo peor, perder la cosecha.
Hoy vamos a enumerar los 10 errores más comunes que suelen sufrir los cultivadores con menor experiencia, para que cada uno tome nota de cómo hay que actuar en cada caso:
1.-Utilizar un sustrato de mala calidad:
No, no todas las tierras son iguales para el cultivo de marihuana. Las hay especialmente malas, como las que se suelen encontrar en los chinos, y simplemente malas, como las muchas que se pueden encontrar en coperativas, que no son de buena composición, ni están desparasitadas. Si quieres empezar tu cultivo con el pie derecho, compra sustratos de calidad, pensados para el cultivo de cannabis.
2.-Germinar las semillas directamente en el sustrato:
Independientemente del precio de cada semilla, es importante saber cómo germinar semillas de marihuana para lograr el mayor ratio de germinación posible. Jugársela a cara o cruz no es un buen método para lograr el éxito en el cultivo.
3.-Regar frecuentemente las plantas:
Las plantas de marihuana son seres vivos. Es importante saber cómo regar la marihuana y no es bueno mantener el sustrato siempre húmedo, igual que no es bueno que la tierra esté muy seca. El riego de las plantas debe lograr humedecer el sustrato totalmente, y una vez logrado hay que esperar a que se seque para volver a hacer un riego. Este aspecto es especialmente crÃtico al principio, ya que un sustrato siempre húmedo reduce el oxÃgeno disponible para las raÃces, además de dificultar su avance.
4.-No utilizar ningún fertilizante:
Aún y comprar un sustrato muy abonado, las plantas que están en macetas van a consumir este abono y luego necesitarán de un aporte extra. No importa si el fertilizante es lÃquido o sólido, pero si queremos obtener un buen rendimiento de nuestras plantas es importante tener en cuenta sus necesidades. Un abono para crecimiento y un abono para floración es lo mÃnimo que vamos a necesitar, todo lo demás puede ser de ayuda pero si hablamos de indispensable lo dicho.
5.-Sobrefertilizar las plantas:
Por mucho abono que le demos a las plantas, no significa que vayan a crecer más o vayan a producir más. Lo más común si sobre-fertilizamos es que las plantas se bloqueen y aparezcan problemas. En este y en otros casos: Menos es más, dosificando cada producto como sugiere el fabricante, e incluso añadiendo menos cantidad de producto, es probable que consigamos mejores resultados. La explicación es clara: Una carencia se soluciona añadiendo más producto, un exceso significa un bloqueo en la planta durante dÃas, e incluso semanas, que es irrecuperable.
6.-Cortar hojas de la planta:
Existe la tendencia a querer quitarle hojas a la planta pensando que asà la luz le dará a los cogollos. Mal: Las hojas son la forma cómo las plantas adquieren la energÃa necesaria para realizar todos sus procesos internos. Si les quitamos las hojas, le estamos quitando vida, más aún si las que quitamos son esas hojas grandes y verdes. Hay que intentar mantener la planta verde hasta que empiece el lavado de raÃces, que es cuando las hojas empezarán a ponerse amarillas - sÃntoma que demuestra que ya no se le están añadiendo productos y que está consumiendo sus reservas internas-.
7.-No prevenir las posibles plagas:
Que las plantas no tengan ninguna muestra de plagas no significa que no las puedan sufrir más adelante. La mejor forma de no padecer una plaga infernal es utilizar preventivos contra plagas ( a poder ser biológicos, los quÃmicos no deberÃan utilizarse nunca en floración).
8.-Utilizar un agua de mala calidad:
Las plantas necesitan de agua, luz y sustrato. Si alguno de estos tres puntos no es bueno, todo lo que venga tampoco lo será. Es importante asegurarse de tener una buena calidad de agua de partida. Aguas duras (con muchos minerales disueltos) son un gran enemigo. Si el agua de nuestra zona no es buena lo mejor que podemos hacer es utilizar un filtro de osmosis para eliminar todas esas sales que no nos interesan.
9.-Querer cosechar pronto:
El cultivo de marihuana necesita su tiempo. Hacer las cosas deprisa y corriendo no nos traerá más que desilusiones en la cosecha. Si hemos cuidado de las plantas durante todo el ciclo, es mejor no precipitarse en la cosecha por ansia de fumar, la cantidad y la calidad de las flores mejora mucho cada dÃa que se acerca a su punto óptimo de cosecha. Mejor esperar unos dÃas más que cortar pronto.
10.-No hacer un buen secado y curado:
De la misma forma que en el punto anterior, es importante tomarse su tiempo para el secado una vez hemos cosechado. Las flores de marihuana mal secadas no tienen un buen sabor, ni el efecto apropiado. Moraleja: Si hemos esperado 3 meses a conseguir la cosecha, no queramos estropearla por 10 dÃas.
Te ha parecido interesante este artÃculo? Quizá te interesen estos:
1 Comment